Es viernes, hemos ido a ver a nuestra pequeña princesa y está todo perfecto (llegamos ya a las 20 semanas!!) y además no he tenido que cocinar, porque hemos comido con los abuelos. Qué más se puede pedir? Jajaja bueno, una pequeña siesta no estaría mal 😛
La abuela ha preparado la comida preferida del peque aquí, albóndigas con salsa de tomate y arroz. A la salsa de tomate, la abuela le pone además varias verduras: cebolla, pimiento, apio… Las albóndigas se las aplasto con el tenedor y se lo mezclo todo. Yo me lo como igual 😀
– Salsa de tomate (si es casera, mejor. Receta aquí)
Pasos:
1. Empapar los copos de avena o la miga de pan con un chorrito de leche/agua/bebida de avena.
2. En el vaso de la picadora poner los filetes de merluza crudos y triturarlos hasta que quede una masa.
3. En un bol, poner la merluza picada. Añadir el huevo, el perejil picado, el ajo picado o rallado en pequeñito, los copos de avena escurriéndoles el exceso de líquido, las dos cucharadas de pan rallado y mezclar todo muy bien. Añadir pizca de sal y pimienta.
4. Formar bolitas con las manos, pasarlas por harina y dorarlas por todos los lados en una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra. Al sacarlas quitarles el exceso de aceite poniéndolas en un plato con papel de cocina.
5. En una olla, poner la salsa de tomate. Añadir las albóndigas y cocer a fuego lento con la olla tapada durante unos 10 minutos.
Notas:
– Se puede usar copos de avena o miga de pan para ligar las albóndigas. Igual se puede usar leche o bebida de avena o agua para empaparlos.
Hoy comimos pasta con albóndigas de merluza en salsa de tomate, y piña de postre.
Anoche con lo de que el peque comió pescado me vine arriba y quise probar hoy con estas albóndigas de merluza. Se las desmenucé en la pasta y se las comió bien. Buena señal!
No quedaron mal, pero la verdad es que, al menos a mí, me gustan más las de ternera. También es que la merluza que utilicé ha sido de la congelada… El gallo de anoche era fresco, y vaya si se nota! No olía ni a pescado.