Hoy para comer había preparado un potaje de calabaza, judías verdes y alubias blancas. Primera vez que lo hacía, y no ha salido malote!
Desde mi punto de vista, claro. El peque lo ha probado y no le ha gustado. Ha sido probarlo y acto seguido meter la cuchara en el plato y dármelo para que se lo quitara de la trona.
La segunda opción más rápida que tenía: arroz tres delicias que me dio ayer mi suegra, con un poquito de salsa agridulce. Tampoco. Lo probó y no le gustó.
Última opción: un poco de caldo de puchero y fideos, que he tenido que preparar en unos 5 minutos eternos mientras el peque lloraba, me llamaba “mamá!! mamá!! mamá!!!” y yo intentaba calmarlo, sin mucho éxito, explicándole que le estaba preparando unos fideitos. Ay madre… Santa paciencia 😛
Y eso ha sido lo que ha comido hoy, fideos, y luego unos nísperos de postre.
En fin! Cosas que pasan 😉