Hoy no me ha dado tiempo de cocinar!
Llegamos tarde de la calle y pensaba hacer unas arepas rápidamente, pero el peque venía hambriento. Tanto que vio la lavadora abierta y sacó el babero que había dentro, me lo trajo y luego intentó subirse él solo a la trona levantando la pierna jajaja.
Así que tiré de unas albóndigas en salsa de tomate que nos dio la abuela el otro día y que tenía en el congelador. Las descongelé rápido en el microondas y a comer! Ya estaban cocinadas, lo que hice fue aplastarlas luego para asegurarme de que no estaban más calientes por un lado que por otro. Eso, unas galletas cracker y unas uvas. Le ofrecí también aguacate pero no quiso.
En la noche intentaremos compensar y no ponerle tanta proteína 😉